My life as a bureaucrat

Hoy salí del trabajo a las 7:30 PM. Podía haberme quedado más porque siempre hay algo más que puedo hacer, pero cuando me di cuenta de que ya no había casi nadie en la oficina me espanté de mí misma.
Esta semana salí tarde casi todos los días, y creo que lo queda del mes será casi igual. No sé qué clase de vida es esta, los días se pasan super rápido, las semanas vuelan, yo me estreso muchísimo y no hago nada llegando a mi casa más que barrer o tratar de barrer el piso blanco que no deja de ensuciarse.
-No checo tarjeta y como frente al monitor. Le dije a un querido amigo que acabo de descubrir, a lo que él respondió:
-Ash, hasta parece canción de Arjorna-
El punto es que es verdad, vivo en una mala rima arjonesca.
El trabajo burocrático nunca nunca termina... "perfeccionamiento de la burocracia" creo que sería la definición más exacta: las cosas se hacen para volver a hacerse. Yo hago, deshago, archivo en papel, en hojas de excel, en carpetas verdes y en folders azules saco fotocopias en papel reciclado y me siento mal de gastar tanto papel. Es como barrer mi piso blanco: no importa cuántas veces lo haga, siempre lo voy a tener que hacer otra vez.
A veces me desespero porque siento que no estoy construyendo nada, pero luego pienso en que todavía no sé qué es lo que hay que construir y que por eso está bien esperarse un poco y disfrutar profundamente de la persona que voy siendo (como dice la buena Felisbertiana) porque así me voy viendo a mí misma desde otro ángulo.
El ángulo de la burocracia.... jajaja how silly is that?

Lo que no quisiera es que la vida siguiera con este sabor de ser algo temporal. Como si en realidad todavía no viviera aquí y estuviera haciendo algún tipo de estage semestral.
Ahora por eso creo que necesito una silla donde me pueda sentar a pensar a gusto. Y a leer.

Comentarios

José dijo…
Cómprate un sillón, un buen sillón.

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