Tardes de té

Definitivamente no quiero convertir esto en un libro de quejas, pero no tengo muchas cosas qué contar en estos días. Todo pasa absurdamente rápido y sin sentido últimamente. Y es extraño porque no me siento frustrada como otras veces y trato de adivinar si esto es realmente una inversión a mi bienestar futuro como antes había pensado que sería (de hecho no sé si eso tenga sentido, pero siempre uno espera cosas sin sentido de las cosas sin sentido que hace día con día).
Lo que sí es que el tiempo me pasa muy rápido, y que tristemente una de las razones que me hicieron feliz de saber que me quedaré en este pueblo más tiempo es que tendré "más tiempo" para decidir qué quiero hacer con mi vida, porque claramente todavía no lo sé y no tengo idea de cómo empezar a saberlo.
Siento que tendría que reflexionar estas cosas, pero no tengo ganas y no sé si tenga caso, por lo menos ahora.
El punto es: no sé qué quiero, y ni siquiera odio lo que hago como para querer salir corriendo. Porque aunque a veces parezca que sí lo odio, muchas veces, y en conjunto, me gusta y lo disfruto.
Lo que sí sé es que no puede estar bien quedarme todos los días hasta las 10PM en la oficina envuelta en una mantita que me robé del ADO platino.
Y sé también que haber traído la kettle de mi casa a la oficina es un favor a mi y no a mis compañeros, ya que es una clara señal de que paso más tiempo aquí que allá.

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